Las carreras que desplazarán a la Fórmula 1: Los circuitos de drones
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Drones usados para garantizar la seguridad, drones para filmar películas y ahora drones en carreras a control remoto ¡con espectadores! Este desarrollo tecnológico ha potencializado sus cualidades al formar parte ahora del mundo del entretenimiento en vivo. Hoy en día existen torneos entre pilotos de drones que son abiertos al público tanto presencialmente como vía transmisión, por lo que se vive la adrenalina que antes conocimos al asistir a una carrera de autos.
Sus antecedentes se remontan a más de ocho años atrás pero ha sido en estos últimos dos, que este ámbito cobró fuerza debido a la pandemia. Las carreras de drones o carrera FPV (vistas en primera persona) consisten en drones equipados con cámaras que permiten la transmisión de su recorrido en vivo. De esta forma, la empatía con el conductor o con quien porta el control del dron, se vuelve más cercana pues tenemos la posibilidad de ver lo que ve y sentir que nos movemos con ella o con él.
El reto aquí, al igual que en los circuitos de carreras de automóviles, consiste en recorrer un trayecto a la mayor velocidad posible hasta llegar a la meta. La ventaja en tiempos de pandemia: podemos verlo vía streaming. Las carreras de drones, desde su inicio, fueron planeadas como eventos a distancia, por lo que la imagen tiene desde su fundación, todo el propósito de ser espectacular.
Una de las carreras FPV más populares a nivel mundial se trata del Xtreme Drone Circuit que va cambiando de sede por año y que debido a sus venues como en el caso de la edición 2015 en Las Vegas, es posible que muchos competidores, cerca de 50, se inscriban a la vez. Según describe Raúl Álvarez en un artículo para Xataka, fueron cerca de 3,000 espectadores los que sintonizaron esa carrera; otra ventaja que posee esta competencia que está a punto de ser catalogada como deporte.
Ahora bien, algo muy destacable de esta competición es que si el piloto del dron pierde el control de la velocidad u otro factor en la carrera, se pone en riesgo el equipo y sistema del dron en el que se ha invertido mucho dinero y tecnología, pero no la vida del piloto, diferencia fundamental en relación a las competencias de autos.
Las carreras de drones ofrecen muchas ventajas atractivas tanto para la manera en la que consumimos entretenimiento hoy en día, como para las vidas particulares de los aficionados a la velocidad y la conducción profesional, siendo también muy complejo el sistema desde el cual operan los drones FPV.
Quién sabe, quizá se trate próximamente del espectáculo más popular de los años que vienen.
